Foto: Max Mumby / Indigo / Getty Images
En cualquier otra condición —una “normal” podríamos pensar, aunque la normalidad se ha convertido en esto otro—, mucha más gente hubiera despedido al príncipe Felipe. De haberse podido seguir el plan original, hubieran sido 800 invitados a la despedida. La suma se lograba gracias a la conjunción de familiares, amigos y representantes públicos. Sin embargo, las restricciones de aforo dieron un vuelco que no esperábamos. La todavía presente pandemia por covid-19 orilló a que la reina Isabel II redujera dicha lista a 30 invitados. ¿Tan poca gente? ¿Tan pocos rostros para decir «adiós» a uno de los monarcas con mayor visibilidad (e impacto) en el mundo? Sí. La seguridad de todos lo demanda.
Y la situación es de tal seriedad, que la Familia Real a dispuesto que toda esta ceremonia se haga a puerta cerrada. Sin un vistazo siquiera al exterior. Todo para que la gente no intente acercarse y ocasione tumultos con graves consecuencias (contagios).
Finalmente, esa lista de invitados que a todos conmocionaba —porque ¡¿quiénes de entre toda la familia estarían presentes y quiénes fuera?!—, ha sido revelada.
Recordemos que estos últimos nombres en la lista se deben a que la reina decidió que figuren dos de los sobrinos-nietos y uno de los primos de su difunto esposo. Parientes que ya habían expresado su gran deseo porque la familia alemana estuviera debidamente representada en el funeral del duque de Edimburgo.
De acuerdo con informes del Daily Mail, estos guardaron un periodo de cuarentena en la casa de un amigo.
Los asistentes que no convivan usualmente con la Familia Real tendrán que guardar la distancia de seguridad durante toda la ceremonia y deberán llevar mascarilla.
Se informa que tanto la reina Isabel II como el resto de la familia nuclear guardarán luto hasta que se completen dos semanas de la muerte del príncipe Felipe.