A lo largo de su vida, la reina Isabel II demostró lo mucho que le gustan los animales y el amor especial que tiene por los perros, en particular, la raza corgi.
Por Karen Huerta
Su amor por esta raza comenzó por Susan, el Pembroke Welsh Corgi que le regalaron el día que cumplió 18 años. La reina Isabel II y Susan la corgi, crearon un lazo mucho más fuerte de lo que ella pudo haber imaginado, era tanto el amor por su perrita, que incluso en su momento, la princesa se la llevó a su luna de miel con el príncipe Felipe.
Desde Susan, la familia real británica ha supervisado un programa de cría de Pembroke Welsh Corgi en el Castillo de Windsor, lo que nos deja saber, que Susan es el ancestro común de todos los Corgis que ha tenido Isabell II. Sin duda, las mascotas de la monarca fueron sus fieles acompañantes a lo largo de su vida.
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Aunque la reina siempre se caracterizó por tener múltiples corgis, también ha tenido otros perros de diferente raza, como salchicha y una mezcla de ambas. Tras su muerte, el pasado 8 de septiembre, la monarca dejó 4 perros: dos corgis, un dorgi -mezcla de corgi y salchicha- y un cocker. Hasta el momento, se sabe que el príncipe Andrés y su ex esposa Sarah Ferguson, se harán cargo de Muick y Sandy que vivirán con ellos en Windsor, vivienda en la que residen a pesar de su separación- estos perritos fueron un regalo para la reina después de la muerte del duque de Edimburgo-; aún cuando la monarca se había resistido a tener más, dado que no quería que la sobrevivieran, decidió integrarlos a la familia.
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Muick, el corgi que inicialmente llevaba el nombre de Charles como su hijo, fue comprado en 2021 a un criador y fue llamado como el lago favorito de la reina en Balmoral. Este llegó a la casa de la reina con un dorgi – entre corgi y salchicha-, al que llamó Fergus, en honor a su tío materno. Fergus murió cinco meses después y llegó un nuevo corgi llamado Sandy que le regalaron en su cumpleaños, el príncipe Andrés y sus hijas, Beatriz y Eugenia. Además, Candy, un corgi que probablemente sea adoptado por trabajadores de la reina. Y finalmente, Lissy, un cocker spaniel que vive actualmente con su entrenador Ian Openshaw.
Los corgis de la reina ganaron fama que incluso fueron representados en la moneda que se diseñó para su Jubileo de Platino.
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