El cuerpo del pequeño Lane fue recuperado después de una larga búsqueda.
Orlando, Florida vuelve a ser escenario de una tragedia. Este martes se dio a conocer que un caimán atrapó a un pequeño de dos años en el Grand Floridian Resort, ubicado en Disney World.
De acuerdo con varios reportes de la policia y de The Washington Post la familia se encontraba dando un paseo cerca de la laguna conocida como ‘Seven Seas’ cuando el pequeño fue, literalmente, capturado. En ese momento, el padre del pequeño se lanzó al agua para intentar salvar a su hijo pero no lo logró.
La tarde de este miércoles reportes de TMZ revelaron que el pequeño, de nombre Lane Graves y originario de Elk Horn, Nebraska, fue encontrado sin vida y al parecer no hay señales que reflejen que el cocodrilo lo atacó.
Se sabe que más de 50 agentes en helicópteros y botes, además de un equipo de buzos, expertos en trampas y un sistema de radar, llevaron a cabo una intensa búsqueda.
El sheriff del Condado de Orange, Jerry Demings, confirmó en la tarde la muerte del hijo de Matt y Melissa, originarios de Nebraska.
El animal medía entre 1,2 y 2 metros de largo, añadió, y cree que solo ahogó al niño, pues su cuerpo fue encontrado "completamente intacto".
Medios internacionales han informado que varios testigos contaron a las autoridades que debido a que a la orilla del lago se estaba proyectando una película al aire libre, los padres habían colocado una especie de corral pequeño para bebé, aproximadamente a 20 y 30 metros de distancia de la orilla Seven Seas para disfrutar de la noche.
Funcionarios de fauna capturaron y sacrificaron a cinco caimanes de la laguna para examinarlos en busca de restos del niño, pero no hallaron pruebas de su implicación, dijo Nick Wiley, director ejecutivo de la Comisión de Conservación de la Vida Salvaje y Acuática de Florida.
