Diseñadora de vestuario australiana que aquel año ganó el Oscar en su categoría por The Adventures of Priscilla, Queen of the Desert. Lizzy apareció en la alfombra roja usando un vestido hecho con 254 tarjetas de crédito American Express Gold, ensambladas con alambre. Un look que a muchos enfadó por no “tomarse las cosas en serio”, pero que en realidad guarda dos peculiares datos detrás. Primero, el diseño pertenecía al vestuario no utilizado de la ganadora película —porque AMEX no lo permitió— y, segundo, la diseñadora no tenía dinero para usar otro vestido esa importante noche de su carrera. Un vestido de horror, una gran idea drag y una historia muy humana de finanzas; todo en el mismo paquete. (Foto: Getty Images)
Los 7 looks más controversiales en las alfombras rojas del Oscar