Aunque todavía está algo apenada por el inminente final de la serie que la convirtió en toda una estrella, ‘Juego de tronos’, lo cierto es que la actriz Emilia Clarke (32) no podría haber soñado con una fiesta de cumpleaños más especial que aquella de la que pudo disfrutar esta misma semana en compañía de alguien muy importante para ella, el cineasta Charlie McDowell (35), como se desprende de las publicaciones que ambos han compartido en sus respectivas redes sociales.
“Bueno, este ha sido un cumpleaños que no olvidaré en una larga temporada”, ha escrito la intérprete en su espacio personal junto al emoticono de un corazón y, lo que parece más revelador, una imagen en la que aparecen dos siluetas en la arena: una dándole a la otra un cariñoso beso en la mejilla.
Para dejar patente que era él y no otro el encargado de acompañar a la artista en una jornada tan emotiva y entretenida, el mencionado Charlie -hijo de los actores Malcom McDowell (‘La naranja mecánica’) y Mary Steenburgen- colgó poco después un mensaje dirigido a su buena amiga en el que, además de desearle un feliz cumpleaños a la vista de todos los internautas, también destacaba la presencia de un corazón rojo.
Afortunadamente para Emilia Clarke, y al margen de la verdadera naturaleza del vínculo que le une a Charlie McDowell, los festejos por su 32 cumpleaños y la buena compañía le habrán venido de perlas para desconectar momentáneamente del luto profesional en el que se encuentra y, sobre todo, de todas esas “lágrimas” que derramó en el set de grabación y en la semana posterior al fin del rodaje.
“Ha sido una temporada muy agridulce y desde luego cayeron muchas lágrimas en los decorados. Y a partir de ahí nos hemos sumergido todos en una especie de crisis existencial. Bueno, en realidad es una crisis genuina y legítima, cuando terminamos me quedé en plan: ‘¿Y ahora qué?'”, explicaba en una entrevista reciente.