Después de que se diera a conocer que Íñigo Onieva engañó a Tamara Falcó, la hija de Isabel Preysler ha encontrado su refugio ante una de las situaciones más difíciles de su vida.
Este sábado, Tamara Falcó llegó a la Ciudad de México para participar como ponente en el Congreso Mundial de las Familias, confirmando que sus compromisos profesionales siguen en pie en medio del duelo que atraviesa tras romper su compromiso con Íñigo Onieva, quien aceptó públicamente “no haber sido honesto con Tamara y su familia”. Esto después de que salieran a la luz los videos donde aparece besando apasionadamente a otra mujer.
Días después, Tamara dio la cara frente a las cámaras y confesó que “estaba enamorada y nunca pensó que Íñigo traicionaría su confianza”, y aseguró que no hay vuelta atrás, está decidida a darle vuelta a la página después de que su ex prometido la engañó a poco de llegar al altar.
Habían pasado solo unos días de que Tamara presumió su anillo de compromiso y dio a conocer su compromiso; sin embargo, sus planes cambiaron repentinamente. Ante esta situación, Falcó ha sido cobijada por el apoyo y cariño de su familia, especialmente de su madre, con quien se encuentra desde que terminó su relación. Además de su hermana y sus primos.
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No obstante, Tamara se ha refugiado en una fuerza mayor basada en sus creencias católicas para salir adelante. “Estoy contenta porque confío en Dios. Si esto ha pagado será por algo y solamente puede ir para bien”, confesó la marquesa que este sábado impartió una conferencia llamada Familia y Entretenimiento, junto al cineasta español Juan Manuel Cotelo, y otros invitados.
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