Columnista CARAS México
Ana Pazos @anapazoslifecoach
A mí el Día del Padre me genera sentimientos encontrados. Si bien, es un momento para hacer un homenaje a todos los papás por su amor incondicional, su fortaleza y por ser fuente de inspiración para sus hijos, pero a la vez me hace falta el mío, que vive lejos de mí.
Mi papá fue un papá diferente al que tuvieron todas mis amigas. Tras heredar, decidió volverse “amo de casa” jajaja y aunque teníamos ayuda en casa, él era quien decidía los menús, nos llevaba a la escuela, al club, a las juntas, etc… mientras mi mamá, que es doctora, trabajaba.
En aquel entonces, eso no era nada común. Mis amigas se burlaban porque no lo entendían, pero yo agradezco todos los días la oportunidad de haberlo tenido tan cerca.
Además, mi papá no fue cualquier amo de casa, era dedicado y es un hombre muy enterado. Incluso, nuestras comidas, ¡eran macrobióticas! Una dieta muy popular en los años 70, que consiste en llevar una alimentación equilibrada según los principios del Yin y del Yang dictados por la filosofía oriental. Y para lograrlo se prohíben ciertos alimentos yse toman patrones muy estrictos de alimentación: horarios, tipos de cocina y alimentos que se pueden consumir, así que además de todo, nuestro lunch podía llegar a ser un pastel de arroz integral jajaja.
Otro ejemplo de que mi papá es alguien muy consciente sobre la salud es que vivíamos en una ciudad de playa, y me acuerdo que a las 11am, nos teníamos que ir porque el sol, a partir de esa hora ya no era saludable.
Para mi papá el deporte es fundamental. Sobre la escuela nos decía que con que sacáramos 6 estaba perfecto y al salir, a hacer deporte. Él entrenó y a mis hermanos para ser atletas, el vio su talento para el tenis y el fut. Algo muy representativo de él fue que siempre ayudó a chicos sin recursos de la favela con talento para el fut. Entonces nos íbamos a Europa con algún “hermano prestado” que era un chico, jugador muy talentoso, para que probaran suerte en Europa. Algunos de estos chavos incluso pasaban temporadas en nuestra casa para preparase para torneos.
Mi papá es un visionario y por lo mismo, estaba criando hijos de una forma diferente, sin seguir los patrones de aquel momento. Nos enseñó valores importantes como la generosidad, honestidad, la disciplina, a planear y seguir el plan, etc…
Sin duda es un hombre excéntrico, que no se preocupa por caerle bien a los demás, con humor negro, es un hombre pacífico, que en cuanto tuvo hijos se dedicó al cien por ciento a la familia. Nunca tuvo esa necesidad de irse de fiesta con los amigos; su hit era acompañarnos y tener una vida saludable.
Algunas frases de mi papa:
- “Acuérdate, tu palabra vale más que un documento firmado, cumple lo que dices”.
- “No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan”.
- “Confía en ti; vuela alto; tú puedes lograr lo que te propongas”.
Y hoy, me da tanto gusto ver a tantos papás súper involucrados y disfrutando sus hijos. Vivimos en un México muy diferente al que yo conocí hace 15 años, donde los papas solo trabajaban y tenían muchas salidas sociales. Ahora, cuando camino en el parque los fines de semana, veo a muchos papás solos paseando a sus dos o tres hijos, igual que cuando voy a mi Acapulquito en el condominio, veo a los papás jugando en la playa con sus hijos mientras la mamá lee un libro.
Qué increíble poder ser testigo de esta gran evolución y ver cómo ha cambiado lo que es ser papá a lo que es hoy de lo que significaba antes. Y más aún, ver que tantos papás eligen ser cercanos a sus hijos e involucrarse en su educación y crianza.
Un papá moderno, además del trabajo, comparte las tareas con la mamá tanto al educar a sus hijos como en las tareas del hogar. Busca encontrar el equilibrio entre su vida profesional y personal y busca crear buenos hábitos para el mejor desempeño de sus hijos. Él demuestra emociones y sentimientos de forma transparente para que sus hijos vean de forma clara un hombre con quien se identifican. No existe una fórmula perfecta ni única para ser un gran papá, pero yo, hoy, le puedo decir a mi papá que fue el principal incentivador para cumplir mis sueños.
Claro que todos nuestros papás son nuestro héroe, pero hoy es un gran día para agradecer y reflexionar, ¿qué es lo que más admiras o admirabas en él?
¡Gran abrazo para todos aquellos que hoy lo extrañan, a los que hoy lo tienen cerca y los que son grandes padres! Ana Pazos
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