Se sabe que la reina Isabel II mandó un convoy para recoger a los Duques de Sussex.
Por Erika Roa Torre
El día de ayer, miércoles, el príncipe Harry y Meghan llegaron al Reino Unido por invitación especial de la reina Isabel II para asistir a los festejos por el Jubileo de Platino.
La prensa inglesa se ha hecho eco de que los Duques de Sussex volaron en avión privado desde el aeropuerto de Santa Barbara al Reino Unido.
Ellos iban acompañados de sus dos hijos pequeños, Archie Harrison de 3 años y Lilibet Diana que el próximo sábado 4 de junio cumple su primer año de vida. Este es el primer viaje de Lilibet al Reino Unido, país de donde es originario su padre.
La monarca mandó una camioneta Land Rover y seguridad para recibir a su nieto aunque debido al pleito legal que interpuso Harry contra el Ministerio Interior, en especial contra la Policía Metropolitana, ésta se ha negado a brindarle protección 24/7 al príncipe y su familia. Pero por petición de la reina fueron a recibirlo para después trasladarlo a la casa de los Sussex, Frogmore Cottage.
Algunos miembros de su seguridad estadounidense los acompañaron a Gran Bretaña, eso sí, no podrán portar armas en suelo británico.
Una bienvenida fría
Los Duques de Sussex regresan a Inglaterra en medio de una gran polémica ya que tanto prensa, como opinión pública e incluidos algunos miembros de la familia real creen que la soberana no debió invitar a los Sussex ya que eclipsarán su Jubileo. La polémica siempre acompaña a Harry y Meghan y más después de la entrevista que dieron a Oprah en marzo del 2021 donde acusaron a los Windsor de racistas entre muchas otras cosas.
Pero ¿Porqué Harry y Meghan querrían volver con la familia que según ellos los ha tratado tan mal?
El Daily Mail cree que sus motivos son económicos pues según este medio los duques viven una crisis económica importante. La cancelación de varios proyectos como la serie Pearl con Netflix donde la pareja invirtió mucho dinero y tiempo así como el contrato que rompieron con Spotify, han afectado de manera importante su fortuna.
Una prueba de que lo anterior tiene fundamento es que Meghan y Harry han vuelto aparecer en numerosos eventos como torneos de polo donde se dice han cobrado algunos miles de dólares por su aparición. Algo impensable hace dos años cuando renunciaron como miembros de la familia real. En aquel entonces por participar en un acto pedían como mínimo un millón de dólares. La pareja sólo pudo facturar algunos eventos por esta cantidad ya que su entrevista con Oprah y todas las acusaciones contra la familia real han afectado seriamente su popularidad de ahí que hoy se tengan que conformar con unos cuantos miles de dólares por hacer una aparición.
Los Sussex necesitarían nuevamente recuperar esa aura de realeza que dar el asistir a Buckimgham como familia de la reina. Es quizá por eso que han tenido que volver al Reino Unido junto a los Windsor, aún cuando llevan dos años quejándose de ellos.
Invitados pero no a todo
Los Duques de Sussex asistirán al Trooping the Colour pero al igual que el príncipe Andrés, no se asomarán al balcón junto con a la familia real. Donde sí los podremos ver en la ceremonia religiosa que se llevará cabo en la Catedral de San Pablo como acción de gracias por el Jubileo de Platino.
Lilibet conoce a Lilibet Diana
La hija de Harry y Meghan cumple su primer año de vida este sábado 4 de junio por lo que sus padres organizarán una pequeña reunión en Frogmore Cottage para festejarla. Podría ser este momento el perfecto para que la soberana conozca a su bisnieta. Así lo aseguran los medios ingleses.
Los que no estarán presentes en la fiesta de su sobrina serán los Duques de Cambridge, William y Kate que viajarán a Gales aunque posiblemente sí envíen a sus tres hijos pequeños, los príncipes George, Charlotte y Louis.
Estos días estarán llenos de encuentros esperados y otros algo incómodos.
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