Vicente Rojo fue uno de los diseñadores gráficos, pintores y escultores más importantes de México, cuyas obras rompieron paradigmas. Adscrito a la generación de la ruptura, él fue uno de los representantes con mayor relevancia del abstraccionismo. Su legado cultural marcó la historia de nuestro país durante más de cincuenta años, llegando a suplementos, periódicos, libros, exposiciones y publicaciones importantes.
“Mi sueño era hacer carteles, portadas de libros, formatos de revistas y hasta pintar cuadros. No conocía aún a Vicente Rojo, pero eso es lo que quería ser: un Vicente Rojo” – Rius
El ganador del Premio Nacional de Ciencias & Artes, el Premio México de Diseño, y la Medalla al Mérito en las Bellas Artes dejó miles de obras que transformaron el mundo del arte, incluyendo la mítica portada de Cien Años de Soledad por Gabriel García Márquez. Inició su trayectoria indagando en la tipografía editorial bajo el cobijo de Miguel Prieto.
Desde entonces, su trabajo apareció en casi todos los periódicos relevantes de la Ciudad de México durante las siguientes cuatro décadas: La Revista de Bellas Artes, México en la Cultura, La Cultura en México, La Revista de la Universidad, La Gaceta del Fondo de Cultura Económica, Nuevo Cine, Diálogos, Cuadernos Políticos, Plural y La Jornada.
Pero fue la influencia del barcelonés Vicente Rojo sobre el mundo de las portadas literarias que ha mantenido sus obras en el imaginario de millones de personas: desde José Emilio Pacheco hasta Juan José Arreola, su obra acompañó los textos de los autores latinoamericanos más importantes del siglo pasado.
