Suntuosa, multicultural, pero sobre todo acogedora, la ciudad más grande de la provincia de Quebec siempre tiene algo nuevo qué ofrecer. Con una encantadora influencia europea, esta ville francophone ubicada en una isla del río San Lorenzo cuenta con tantos atractivos como experiencias que, sin duda, harán que quieras visitarla más de una vez. Aquí nuestras recomendaciones para disfrutarla como toda una montréalaise.
Ve de compras
Si bien las boutiques de diseñador y tiendas de marcas locales sobran en la ciudad, el paraíso para los amantes de las compras lo encuentras en el barrio Golden Square Mile y la avenida Laurier Ouest.
Establecido a finales del siglo XVIII en la falda del Mont-Royal, al oeste del centro de la ciudad, Golden Square Mile se caracteriza por sus mansiones victorianas y edificios comerciales que datan de la década de los cincuenta del siglo XIX, cuando la zona era habitada por las familias más adineradas de Montreal.
Desde entonces, la prosperidad comercial ha sido indiscutible: hoteles de lujo, museos, galerías, restaurantes y tiendas departamentales cohabitan en este barrio de estilo inglés, donde no te puedes perder Holt Renfrew Ogilvy, la nueva megastore de lujo a completarse en 2020. La fusión entre Holt Renfrew –la cadena de tiendas departamentales canadienses con más de 180 años de lujo y buen gusto– y Ogilvy –institución fundada por el escocés James Angus Ogilvy con algunos de los mejores diseñadores del mundo– reúne decenas de las mejores marcas de ropa, calzado y accesorios, como Balenciaga, Chloé, Prada, Saint Laurent, Fendi y Louis Vuitton, por mencionar algunas de las favoritas. Además, tiene un acceso directo al recién inaugurado hotel Four Seasons que, aparte de ser una elegante y moderna opción para hospedarte, cuenta con el restaurante y terraza Marcus, del galardonado chef de origen etíope Marcus Samuelsson.
Asimismo, la avenida Laurier Ouest, ubicada en el distrito de Outremont, es hogar de 200 comercios independientes con tiendas de artículos exclusivos, como L’Émouleur, especialista en la venta de cuchillos de cocina japoneses; cafés y restaurantes internacionales como Fiorellino Laurier, con una carta de platillos italianos reinventados, pero sobre todo boutiques de ensueño como 5e Avenue, una de las famosas en Laurier Avenue. Prestigiosas colecciones de ropa y accesorios, como Marc Cain, Luisa Cerano, Eileen Fisher, Saint James y Anne Fontaine, se encuentran bajo el mismo techo en este local excepcional diseñado por Christian Bélanger Design.
Sin duda Golden Square Mile y Laurier Ouest son nuestras zonas favoritas para ir de shopping, pero si buscas otras opciones para renovar tu guardarropa y llevar a casa un cachito de Montreal con algún artículo exclusivo, visita este enlace.
Acércate al arte
Montreal es una de las mecas culturales del país: sus festivales internacionales, como el Festival Internacional de Jazz, Piknic Électronik (con lo mejor de la música electrónica), MURAL (dedicado al arte urbano) o el de comedia Just For Laughs, pero sobre todo sus museos son paradas que no deben faltar en tu itinerario de viaje.
Algunas de las exposiciones imperdibles para este verano son:
- Thierry Mugler: Couturissime. Más de 150 prendas confeccionadas por el diseñador de alta costura, perfumista, fotógrafo y director francés Thierry Mugler, entre 1977 y 2014, engalanan las salas del Museo de Bellas Artes de Montreal, uno de los primeros museos de América del Norte. Diana Ross, David Bowie, Liza Minnelli e incluso Lady Gaga son algunos de los famosos que han vestido creaciones de Mugler. Un centenar de imágenes capturadas por las lentes de fotógrafos como Helmut Newton, Sarah Moon, Dominique Issermann, Guy Bourdin y Richard Avedon acompañan las piezas de este francés visionario.
- Liberté Conquérante / Growing Freedom. La artista japonesa Yoko Ono hace un llamado a la libertad y la paz con esta muestra que podrás disfrutar en La Fondation Phi pour l’art contemporain, ubicada en el corazón del Viejo Montreal. “Las instrucciones de Yoko Ono” y “El arte de John y Yoko” son las secciones que componen dicha exposición, la cual incluye el icónico Montréal Bed-In de 1969.
No te quedes fuera: averigua qué otras exposiciones llegarán a Montreal durante el verano en esta liga.
Come como nunca
Si lo tuyo es descubrir destinos nuevos mediante el sentido del gusto, el Viejo Montreal te sorprenderá. Empieza tu día con una taza de café –y un pastelito, ¿por qué no?– en Le Petit Dep, uno de los sitios más instagrameables de la ciudad (su fachada verde agua no pasa desapercibida). Conoce la gama de productos locales de esta cafetería high-end de la calle Saint-Paul y llévate algunos souvenirs a casa.
Para el brunch, visita el restaurante Mélisse, sobre la avenida William, donde el chef Bertrand Giguère ofrece platillos refrescantes y ligeros –perfectos para el verano– en su cocina bistró contemporánea con lo mejor de los productos locales. Ya sea que pidas una ensalada, los camarones a la parrilla o las costillas de cerdo, este restaurante es un must para el paladar.
Termina tu recorrido gastronómico por el Viejo Montreal con una cena inolvidable y no te resistas ante los encantos de Le Club Chasse et Pêche. El cómodo y ecléctico restaurante concebido por Hubert Marsolais y el chef Claude Pelletier propone una excelente cocina contemporánea québécoise maridada con una exquisita carta de vinos, además de contar con una decoración elegante y sofisticada que recuerda a un refugio de caza y pesca.
Cafés, restaurantes, bares y terrazas sobran en la ciudad. Da clic en estos enlaces y conoce más sobre la gastronomía montréalaise y su vida nocturna. Bon appétit!
Descansa y consiente tu cuerpo
Tu visita a Montreal no estaría completa sin un tratamiento revitalizante en Bota Bota, spa-sur-l’eau un spa único en el mundo ubicado dentro de un antiguo ferri que yace sobre el agua del río San Lorenzo, anclado al Viejo Puerto de la ciudad.
Desde masajes clásicos hasta especializados para las futuras mamás, faciales, manicuras y pedicuras, y termoterapia a base de agua, este santuario para la relajación es la parada perfecta para purificarte en cuerpo y alma, además de tener vistas espectaculares hacia Montreal y consentir a tu paladar en su exclusivo restaurante La Traversée, con un menú de temporada que aprovecha al máximo productos regionales en platillos simples y sutiles.
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Nota: cuando visites Montreal, comparte tus mejores momentos en redes sociales con el hashtag #MTLmoments.
Por Karen Alfaro